Sentada con los pies colgando observo la vida pasar, unos corren, parece que llegan tarde, otros cargan carritos de bebé, otros cargados de carpetas, hay un grupo de mujeres charlando de sus cosas o de las cosas de los vecinos, quien sabe, unos niños juegan con una lata, el tendero ordena las cajas de frutas, hay cola en la panaderia, un par de hombres trajados entran en la cafeteria, un claxon me distrae y la moto pasa rozando los coches aparcados...
Todos y cada uno de ellos son extraños para mi, a la mayoria no los he visto nunca y si los he visto ni me he dado cuenta de su existencia, y cada uno tiene su vida propia, sus ires y venires, sus más y sus menos, sus historias alegres y dificultosas y lo más curioso es que con ellos comparto la vida sin darme cuenta.
Para ellos yo también soy una extraña que no sabrán mi existencia si no se les ocurre volver la mirada al balcón de mi vida, solo así entenderan porqué unos pies se balancean como si quisieran avanzar en el aire, andar por ellos, acompañarles en la vida, compartir las historias, las alegrias y las lagrimas.
Y es que aqui estoy yoviviendo mi historia, compartiendo el camino, sonriendo a la vida... con amigos, conocidos y desconocidos.